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Museum of Cultural History

Una imagen microscópica de la madera del buque Gjellestad muestra los daños causados por hongos (en negro) en los restos del navío que motivaron la inesperada excavación.

Aunque la tumba fue saqueada en la antigüedad (posiblemente por las fuerzas de Harald Bluetooth), quedaron pequeños objetos como estas cuentas.

Miembros de la excavación limpian un trozo de quilla (la "espina dorsal" del barco) conservado en el buque Gjellestad.

Aunque la mayor parte del barco de madera se erosionó con el paso de los siglos, los remaches de hierro conservados (marcados en blanco) permitirán a los investigadores reconstruir el navío de 18 metros de eslora, que se construyó en la época en que los barcos vikingos empezaron a ser propulsados tanto por velas como por remos.