Los casos de COVID aumentan: breve recordatorio de todo lo que necesitas saber

¿Se puede utilizar una prueba caducada? ¿Cuánto tiempo hay que aislar? Ante el aumento de las variantes infecciosas, le recordamos cómo protegerte y cómo actuar si enfermas.

Por Meryl Davids Landau
Publicado 15 sept 2023, 13:46 CEST
Un residente procesa una prueba COVID-19 autoadministrada en casa.

Un residente procesa una prueba COVID-19 autoadministrada en casa. Toda persona que presente síntomas respiratorios y obtenga un resultado negativo en la prueba casera debe seguir las orientaciones de las autoridades sanitarias y hacerse otra prueba dos días después.

Fotografía de John Tully, Bloomberg, Getty Images

Un nuevo grupo de variantes infecciosas de Ómicron está provocando un aumento en los casos de COVID-19 a nivel mundial. En la última semana de agosto, más de 650 personas murieron en Estados Unidos a causa de la enfermedad (un 10% más que la semana anterior) y 17 000 nuevos pacientes fueron hospitalizados. Según informó esta semana, el Ministerio de Sanidad adelantará este año la campaña de vacunación contra la enfermedad a la última semana de septiembre tras reconocer que la incidencia de la COVID-19 en España ha experimentado un "ligero aumento que se está estabilizando". Y viene de largo: desde junio, la tasa de visitas relacionadas con la COVID-19 en la atención primaria española se ha cuadruplicado.

Con las vacunas actualizadas aprobadas recientemente por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU., los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. recomendaron las vacunas a todos los estadounidenses mayores de seis meses. Los expertos esperan que la inmunidad adquirida por la mayoría de los estadounidenses en anteriores brotes de COVID, las vacunas anteriores y/o la vacuna que estará disponible dentro de unos días, hagan menos probables brotes como el de principios de 2021, cuando unas 20 000 personas murieron cada semana debido a complicaciones relacionadas con el COVID.

No está claro si este repunte de finales de verano podría indicar un patrón anual, ya que la COVID-19 es demasiado nueva para tener temporadas como la gripe, dice Rick Martinello, experto en enfermedades infecciosas de la Escuela de Medicina de Yale en New Haven, Connecticut (Estados Unidos). Uno de los factores que han contribuido al reciente aumento de casos son las olas de calor que asolaron gran parte del país el mes pasado, obligando a la gente a permanecer en casa, donde los virus se propagan con mayor facilidad.

"Por ahora no sabemos si los casos aumentarán un poco y se estabilizarán pronto o si, por el contrario, se producirá un pico significativo", afirma Martinello.

Con el número de casos en alza, aquí tienes algunos recordatorios y recomendaciones sobre cómo protegerte y qué hacer si crees que tienes el virus o enfermas.

(Relacionado: Así es como múltiples infecciones de COVID pueden provocar problemas de salud crónicos)

¿Han caducado tus antiguas pruebas de antígenos COVID?

Las pruebas de antígenos COVID que compraste en la farmacia o recibiste gratuitamente del Gobierno tienen una fecha de caducidad, después de la cual se supone que debes desecharlas. Muchos fabricantes recibieron la aprobación para ampliar sus fechas de caducidad después de que se distribuyeran las pruebas.

Pero las que ya han pasado las fechas de caducidad ampliadas pueden seguir funcionando suficientemente, afirma Zishan Siddiqui, profesor adjunto de medicina en la Facultad de Medicina Johns Hopkins de Baltimore (Estados Unidos). Siddiqui y sus colegas colocaron pequeñas muestras víricas en dos grupos de pruebas BinaxNow de Abbott (algunas dentro de la fecha de caducidad ampliada y otras cinco meses después) y observaron que ambas funcionaban de forma similar. Pero con una diferencia: la línea positiva en las pruebas caducadas era a menudo más tenue, lo que indica que las pruebas más antiguas deben evaluarse a plena luz.

"Creo que es razonable que la gente utilice una prueba caducada que tenga en casa", afirma Siddiqui, sobre todo si la alternativa es no hacerse ninguna prueba. Aún así, los kits más antiguos, especialmente los almacenados en lugares cálidos o hacinados, pueden tener hisopos o tarjetas de prueba dañados o degradación de productos químicos importantes para las pruebas.

Cualquier persona que tenga síntomas respiratorios y obtenga un resultado negativo en una prueba casera (caducada o no) debe seguir las directrices del decálogo del Ministerio de Sanidad y hacerse otra prueba dos días después.

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¿Pasar un hisopo por la garganta o por la nariz?

Resulta que las muestras nasales concentran más virus y, por tanto, es más probable que den un diagnóstico positivo. Además, las pruebas de antígenos no se diseñaron para muestras orales que podrían contener bacterias u otros contaminantes, dice Siddiqui.

¿Se puede enfermar a los pocos días de la exposición al SRAS-CoV-2?

Un estudio reciente realizado en Francia confirmó lo que la gente está sintiendo: que las personas expuestas a Ómicron desarrollan síntomas antes de lo que lo hicieron tras la exposición a la cepa original de SARS-CoV-2.

Es posible que el periodo de incubación sea más corto debido a las mutaciones. Pero también es probable que estos cambios reflejen una mejor comprensión de cuándo es contagioso el virus, sugiere Martinello.

Incluso hoy en día, la rapidez con la que las personas enferman varía enormemente. "No creo que sepamos todavía cuál es el periodo de incubación del COVID", afirma Martinello.

(Relacionado: Los microcoágulos podrían ayudar a resolver los misterios de la COVID larga)

¿Cuánto tiempo se debe aislar a una persona que dé positivo en la prueba del COVID?

Tanto si una persona da positivo en la prueba como si es probable que tenga la enfermedad basándose en los síntomas y la exposición, es crucial que vaya a casa y se aísle inmediatamente de todo el mundo, incluidas las personas con las que convive.

Este aislamiento debe continuar durante un mínimo de cinco días, que comienzan al día siguiente del resultado positivo de la prueba o de la aparición de los síntomas, según las autoridades.

Una persona enferma que comparta vivienda debe permanecer en una habitación separada y llevar una mascarilla durante cualquier breve incursión al baño o la cocina, dice Martinello (si el tiempo lo permite, puede abrir una ventana para dispersar el virus). Si posee un filtro de aire HEPA, debe colocarse en la habitación cerca de la cabecera de la cama del enfermo, un lugar que captura más partículas de virus que fuera de la puerta o en otras partes de la casa.

El periodo de aislamiento puede terminar al cabo de cinco días si nunca se han desarrollado síntomas, o después de que la persona mejore y no tenga fiebre (sin fármacos) al menos 24 horas. Las personas con síntomas graves, como dificultad para respirar, o que hayan sido hospitalizadas deben permanecer aisladas al menos 10 días.

(Relacionado: ¿Sirve de algo limpiar la sangre para tratar la COVID larga?)

¿Cuándo es necesario el enmascaramiento tras el aislamiento?

Una vez en público, la persona debe llevar una mascarilla de alta calidad hasta que hayan transcurrido 10 días desde el inicio de los síntomas o desde que dio positivo. Recuerda: el primer día es el día cero. Esto es importante porque la persona enferma podría ser contagiosa durante 10 días completos.

Los investigadores descubrieron que la mitad de los jugadores de la NBA sometidos a pruebas repetidas en 2021 seguían teniendo niveles virales elevados el quinto día. Es más, si es factible, es preferible permanecer aislado en casa más de cinco días, dice Martinello.

Sin embargo, es seguro desenmascarar antes del día 10 si dos pruebas de antígeno en el hogar tomadas con dos días de diferencia arrojan ambas resultados negativos.

¿Quién debe tomar el antivírico Paxlovid?

Las personas con más probabilidades de hospitalización y muerte deben hablar con su proveedor de atención sanitaria sobre la posibilidad de tomar el medicamento antivírico Paxlovid, que sigue siendo eficaz contra las cepas actuales. Entre los grupos vulnerables se encuentran las personas mayores de 50 años, las de cualquier edad que no se hayan vacunado y las mayores de 12 años con enfermedades graves (enfermedades crónicas de pulmón, hígado, corazón o riñón, cáncer, diabetes) y las inmunodeprimidas o con el sistema inmunitario debilitado (incluso por medicamentos).

Esto debe hacerse pronto, ya que el medicamento sólo funciona si se empieza a tomar en los cinco días siguientes al inicio de los síntomas. Otra opción para las personas de alto riesgo que no pueden tomar Paxlovid es una infusión intravenosa de tres días de Remdesivir, que bloquea de forma similar la replicación del virus.

A algunas personas les preocupa contraer un caso de rebote de COVID después de tomar Paxlovid, pero no está claro si el rebote está causado por el fármaco o por la enfermedad.

Las autoridades sanitarias estadounidenses han aprobado recientemente nuevas vacunas contra la COVID para personas a partir de seis meses. De forma similar, hace una semana que la Unión Europea aprobó la comercialización de la nueva vacuna de COVID-19 de Pzifer. Los beneficios de la vacunación superan los riesgos de efectos secundarios para todos estos grupos de edad, señalaron los Centers for Disease Control and Prevention de Estados Unidos.

Las vacunas de ARNm de Moderna y Pfizer ya no se dirigen a la cepa original del SRAS-CoV-2, sino a la variante Ómicron XBB.1.5, que se asemeja más a las cepas que circulan actualmente. Sólo se necesita una dosis, incluso para las personas que no se hayan vacunado antes (aunque los niños menores de cinco años pueden necesitar varias dosis).

"Estar al día en las vacunas es la herramienta más eficaz de tu caja de herramientas", afirma Vandana Madhavan, experta en enfermedades infecciosas del hospital pediátrico del Hospital General de Massachusetts, en Boston (Estados Unidos).

Además de prevenir enfermedades graves, las vacunas parecen reducir también el riesgo de desarrollar COVID larga tras una infección.

(Relacionado: ¿Cuánto tiempo permanece la COVID-19 en nuestro cuerpo?)

¿De qué otra forma puedes protegerte?

Evitar las aglomeraciones y usar mascarilla siguen siendo medidas de protección muy eficaces, pero la mayoría de la gente no necesita hacerlas las 24 horas del día, los 7 días de la semana. "La prevención no es un interruptor de encendido y apagado, sino más bien un regulador de intensidad que se sube o baja en función de lo que ocurra en la comunidad o en tu vida", afirma Madhavan.

Las personas que tengan factores de riesgo de enfermedad grave o que vivan con personas que los tengan pueden necesitar mantener el interruptor encendido más tiempo. Pero otros podrían quedarse más en casa o llevar protección facial en situaciones de aglomeración, como el transporte público, los supermercados o el cine, sobre todo cuando el número de casos locales es elevado o cuando realmente quieren evitar enfermar, quizá por una boda familiar o unas vacaciones próximas, dice.

Incluso cuando sólo una persona lleva mascarilla está protegida. Las investigaciones de los CDC dejan claro que alguien que lleva una mascarilla de alta calidad, como una N95 o KN95, tiene un 83% menos de probabilidades de contraer un virus circulante que alguien que no lleva mascarilla.

Según Martinello, la tolerancia al riesgo de una persona también influye en la cantidad y el lugar en que se puede enmascarar. "Se necesita potencialmente un momento para exponerse al virus de una persona lo suficiente como para enfermar", señala. Si alguien quiere evitar casi toda exposición o se siente cómodo asumiendo un pequeño riesgo es una decisión individual.

Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.

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