Los nudibranquios son hermafroditas. Las parejas se aparean fertilizando uno al otro y llegan a poner hasta dos millones de huevos.
Fotografía de Jeffrey de Guzman, My Shot Miembros de la familia de los moluscos, los nudibranquios abandonaron sus conchas años atrás. Su nombre científico, Nudibranchia, significa "branquias desnudas", y describe las agallas plumosas y cornudas de la mayoría de ellos.
Fotografía de Jeffrey de Guzman, My Shot Parciales a los climas tropicales, los nudibranquios prosperan a lo largo de los océanos, en agua caliente y fría, de aguas poco profundas de arena y arrecifes en el fondo marino.
Fotografía de Ernie Collier, My Shot Un nudibranquio Ceratosoma de Indonesia alberga un camarón imperial, que intercambia labores de limpieza por un viaje gratis y acceso a los alimentos.
Fotografía de David Doubilet, National Geographic Hay más de 3.000 especies de nudibranquios conocidas, y los científicos estiman que hay otras 3.000 aún por descubrir. Los llamados bailarines españoles, como este de la costa de Nueva Gales del Sur, Australia, cuentan con algunas distinciones sobre otros nudibranquios: En primer lugar, puede ser enorme, llegando a los 46 centímetros de largo. La mayoría de los nudibranquios son del tamaño de un dedo. En segundo lugar puede nadar, una habilidad que la mayoría de nudibranquios carecen.
Fotografía de David Doubilet, National Geographic Los colores llamativos de los nudibranquios avisan a los depredadores de su toxicidad.
Fotografía de Libor Spacek, My Shot Los nudibranquios son ciegos. Sus ojos solo distinguen la oscuridad de la claridad. En cambio el olfato y el gusto lo detectan a través de los apéndices sensoriales de su cabeza conocidos como rinóforos o tentáculos orales.
Fotografía de Jeffrey de Guzman, My Shot Los nudibranquios son carnívoros pero también se alimentan de algas, esponjas, anémonas y corales.
Fotografía de David Doubilet, National Geographic La carne de los nudibranquios resulta tóxica para las criaturas marinas.
Fotografía de Minette Layne, My Shot Generalmente de forma oblonga, los nudibranquios pueden ser gruesos o aplanados, largos o cortos, de color gris o adornados para coincidir con su entorno.
Fotografía de Mohammed Alsaleh, My Shot La química corporal de los nudibranquios puede albergar respuestas que podrían beneficiar a la humanidad. Los científicos están tratando de obtener productos farmacéuticos a partir de su composición química e intentan indagar acerca de la memoria de su simple sistema nervioso.
Fotografía de David Doubilet, National Geographic La vida de los nudibranquios es muy corta. Su esperanza de vida suele ser de un mes. En raros casos puede llegar al año. Su naturaleza elusiva dificulta su estudio. Debido a su falta de espinas y de caparazón estos animales no pueden dejar constancia de su existencia.
Fotografía de Clare Keating, My Shot