La expedición MOSAiC

Un trabajador de mantenimiento entra en los tanques de combustible del Polarstern. El Polarstern es un rompehielos, un barco hecho específicamente para avanzar entre el hielo. Desde su construcción en 1982, el Polarstern se ha empleado en viajes al Ártico y la Antártida.
Fotografía de Esther Horvath, National GeographicEl Salón Rojo del Polarstern ofrece un espacio común donde los pasajeros pueden trabajar. «Cuesta interactuar con las personas y encontrar sitio y una mesa para concentrarte en tu trabajo. Creo que este es el reto de este crucero», afirma la ecóloga Susanne Spahic.
Fotografía de Esther Horvath, National GeographicEntre octubre y marzo, los pasajeros vivirán en un invierno ártico, un periodo de frío intenso y luz escasa. En el hielo, llevarán estos trajes para proteger a los científicos de las condiciones hostiles.
Fotografía de Esther Horvath, National GeographicThomas Wolf Wunderlich, capitán del Polarstern durante las etapas cuatro, cinco y seis. Las tres primeras etapas de la expedición serán dirigidas por el capitán Stefan Schwarze.
Fotografía de Esther Horvath, National GeographicLutz Peine, oficial náutico del Polarstern, se relaja tras completar el curso de supervivencia, durante el que los participantes han podido dormir dos o tres horas, con suerte.
Fotografía de Esther Horvath, National GeographicEl capitán Stefan Schwarze ha llevado el barco desde 2005. Lleva dos años ayudando a la expedición MOSAiC y dice «como capitán del Polarstern, tengo —durante la expedición— la máxima autoridad».
Fotografía de Esther Horvath, National GeographicEl Polarstern atraca para labores de mantenimiento antes de partir hacia el Ártico el 20 de septiembre. Cuatro rompehielos de Suecia, China y Rusia moverán personas y suministros entre tierra y el barco durante todo el año.
Fotografía de Esther Horvath, National Geographic