El pasado julio podría ser el mes más caluroso de la historia
Tras batir junio el récord del mes más cálido de la historia, julio le toma la delantera en una carrera a la que asisten preocupados los expertos climáticos que tratan de evaluar las consecuencias de esta crisis.
"Debemos prevenir una alteración climática irreversible. Es la batalla de nuestras vidas, una batalla para luchar por nuestras vidas. Y es una batalla que podemos y debemos ganar". Así lo afirmaba António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas, al dar a conocer los últimos datos climatológicos que confirman que este año continúa elevando los récords mundiales de altas temperaturas.
La ola de calor europea podría colocar al pasado mes de julio como el más caluroso de la historia desde que se tienen registros, a la par o incluso por encima del de 2016 y justo después de que junio entrase también en la lista como el más cálido del que se tenía constancia.
Así lo afirma la Organización Meteorológica Mundial (OMM) junto al servicio de Copernicus relativo al cambio climático “Solo este año, se han pulverizado récords de temperatura desde Nueva Delhi hasta Anchorage, desde París hasta Santiago, desde Adelaida hasta el círculo polar ártico”, afirmaba Guterres según publica la OMM.
Otro estudio reciente alertaba de que, en el año 2050, una de cada cinco ciudades del mundo tendrá un régimen climático que, a día de hoy, no existe en el planeta, así como el 77% de las grandes urbes asumirá condiciones climáticas propias de ciudades ubicadas a unos 1.000 kilómetros al sur. Madrid, por ejemplo, adoptará el clima de Marrakech.
“Si no hacemos nada para frenar el cambio climático ahora, esos fenómenos meteorológicos extremos serán solo la punta del iceberg. Y, además, el iceberg también se está derritiendo a gran velocidad", añadió Guterres.
Temperaturas particularmente significativas
Hasta el momento, el mes de julio del pasado 2016 fue el mes más cálido del que se tenían datos, pero este julio ha alcanzado las mismas cifras o superiores. Este hecho preocupa especialmente a los expertos debido a que en julio de 2016 vivimos uno de los episodios más intensos de El Niño, pero este 2019 ningún desastre natural ha influido en las altas temperaturas, que sin embargo han alcanzado las mismas cifras.
"Todo apunta a que el período de 2015 a 2019 será el quinquenio más cálido del que se tienen datos”, afirma el estudio, que informa de nueve de los diez meses de junio más cálidos del planeta se han sucedido desde el año 2010, teniendo en cuenta las temperaturas más altas jamás registradas tanto en la superficie terrestre como en la del mar.
"Siempre ha hecho calor en verano, pero estas temperaturas no se registraban cuando éramos jóvenes, ni cuando lo eran nuestros abuelos", afirmó António Guterres.
La cúpula de calor
Recientemente el planeta nos mostraba otra señal más de alerta: la ola de calor europea se desplaza, lo que provoca que la capa de hielo de Groenlandia experimente el segundo mayor deshielo del año.
Este 2019 también se pelea por el récord de deshielo frente al 2012, año en el que se estimó que el 97 por ciento de la superficie de la capa de hielo de Groenlandia experimentaba algún tipo de deshielo, incluso a más de 1600 metros de profundidad bajo la superficie helada. Situaciones en un principio excepcionales que, con el paso de los años, están dejando de serlo. Son circunstancias extremas pasando a ser habituales.
“Necesitamos un cambio profundo y rápido en cómo hacemos negocio, creamos energía, construimos las ciudades y alimentamos al mundo. Habiendo sufrido el que posiblemente sea el mes más cálido de la historia, necesitamos pasar a la acción ya”, concluye Guterres.