
Parte superior de la meseta Chapada Diamantina, al sur del Parque Nacional de Brasil.
Fotografía de Image Broker, Alamy La fauna de las sabanas de América del Sur es menos conocida. Estas selvas son el hogar de animales como el lobo de crin y el ñandú.
El peligro que sufren estos bosques se debe a la agricultura y la producción de carbón.
Fotografía de Frans Lanting, Alamy El tramo de bosques desde el Himalaya, Nepal, Myanmar, el norte de la India y Laos se encuentran bajo gran peligro.
Los bosques están siendo talados tanto para cubrir las necesidades de los lugareños como para satisfacer a la reciente clase media de China y la India.
Fotografía de Andrew Wheeler, Alamy Un bosque cerca de la antigua ciudad de Gedi, Kenia, se sitúa entre los más amenazados del mundo.
Las zonas de Kenia, Mozambique y Tanzania, conocidas como la costa de África oriental tropical y subtropical, los bosques se están convirtiendo en tierra de cultivo para ayudar a alimentar a la creciente población de la región.
Fotografía de Ariadne van Zandbergen, Alamy El bosque de Sunderland también sufre de tala forestal debido a la agricultura.
Fotografía de Dee Mohamed, My Shot Una gorila de tierras bajas huérfana llamada Bangha descansa en el Tchimpounga Sanctuary de la República del Congo.
La selva del Congo es la segunda más grande tras la del Amazonas. Se extiende a través de seis países y está desapareciendo como resultado de la intensa tala de árboles para la agricultura, concretamente para el cultivo de yuca y palma aceitera.
Fotografía de Michael Nichols, National Geographic Cada vez más, los bosques de Mesoamérica, una región que se extiende desde México hasta Costa Rica, están siendo talados para dejar espacio a la agricultura, la ganadería, y centros turísticos.
Estos bosques del Atlántico en la región son también el hogar de la caoba, una de las maderas más preciadas del mundo.
Otro motivo de preocupación para los bosques de Mesoamérica es el comercio de drogas en la región. El tráfico de drogas en zonas que carecen de estabilidad hace que la región sea mas inestable, dado que las preocupaciones se centran en otra parte.
Fotografía de Tom King, Alamy Un río fluye a través de una selva tropical al norte del Parque Natural de Sierra Madre en Filipinas.
Los bosques que se encuentran en islas, como este, suelen ser muy sensibles ya que se encuentran bajo la presión del turismo, especies invasoras y la subida del nivel del mar que está provocando el calentamiento global.
Fotografía de Tim Lamán, National Geographic Este camaleón pantera es una de las miles de especies que se encuentran únicamente en las selvas de Madagascar. Estas especies están en peligro de extinción si la isla los bosques húmedos tropicales y bosques secos desaparecer.
La mayor amenaza para los bosques de Madagascar es la pobreza generalizada del país. Madagascar posee maderas preciosas como el ébano y palo de rosa, que se encuentran en alta demanda en el mercado.
Fotografía de Raúl Touzon, National Geographic Trabajadores despejan el camino de la selva amazónica de Brasil, el bosque más amenazado. Mientras que la tasa de deforestación del Amazonas se ha ralentizado un poco en las últimas décadas, sigue siendo de la más alta. Las grandes extensiones están siendo talados cada año para dar paso a ranchos de ganado y cultivos comerciales como la soja y, más recientemente, el aceite de palma.
Otra preocupación es el creciente número de caminos que se están abriendo a través de la selva tropical.
Fotografía de Bruce Dale, National Geographic